Con más de 100,000 casos confirmados de coronavirus en más de 85 paĂses, los inmigrantes en los Estados Unidos y en el extranjero siguen siendo algunos de los más afectados por la epidemia, desde prohibiciones de viaje hasta ataques racistas. A medida que se propaga el virus COVID-19, las polĂticas de inmigraciĂłn de la administraciĂłn Trump continĂşan alimentando la agitaciĂłn y el miedo que empujan a muchos inmigrantes en los Estados Unidos a las sombras y les impiden buscar atenciĂłn mĂ©dica.
Acceso a la atención médica.
Las comunidades de inmigrantes están luchando con el acceso a atención médica asequible, que sigue siendo un problema apremiante para muchos, especialmente las personas indocumentadas. En los últimos años, ciudades como Nueva York y San Francisco han implementado programas de atención médica para proporcionar cobertura universal a los residentes, incluidos los inmigrantes indocumentados y sin seguro. Bitta Mostofi, comisionado de la Oficina de Asuntos de Inmigrantes en Nueva York, le dijo a NBC: «No nos importa su estado migratorio. Nos preocupamos de que todos tengan acceso a la atención médica ”.
California ha brindado beneficios de salud a menores de 18 años indocumentados desde 2016. La expansión de Medi-Cal del año pasado incluyó a residentes de bajos ingresos de hasta 26 años, extendiendo la cobertura a los 138,000 adultos jóvenes indocumentados del estado.
El estado de Washington anunciĂł que cubrirá los costos de las pruebas COVID-19 para los residentes sin seguro mĂ©dico. El laboratorio estatal está evaluando a 100 personas por dĂa, tiene planes de realizar más pruebas, y no está cobrando a los pacientes por estas pruebas. El estado de Washington tambiĂ©n ha publicado hojas de datos multilingĂĽes, en español y otros idiomas, sobre el virus, los sĂntomas y cĂłmo puede protegerse.
Fernando GarcĂa, fundador de la Red Fronteriza de Derechos Humanos, está trabajando para garantizar que las comunidades fronterizas en Albuquerque tengan informaciĂłn y recursos precisos en lugar de miedo y preguntas sin respuesta. GarcĂa está alentando a las comunidades de inmigrantes a monitorear las noticias provenientes de organizaciones creĂbles con recursos en español como los Centros para el Control de Enfermedades y la OrganizaciĂłn Mundial de la Salud.
Miedo a la deportaciĂłn.
De ninguna manera es un problema nuevo, es probable que muchos inmigrantes indocumentados no busquen atenciĂłn mĂ©dica, incluso si tienen acceso a un seguro de salud, por temor a ser deportados. Mostolfi dijo que la ciudad de Nueva York está «haciendo sonar la alarma sobre las imprudentes polĂticas federales que propagan una peligrosa sensaciĂłn de miedo y estigma en las comunidades inmigrantes «.
En una carta abierta dirigida al Vicepresidente Mike Pence, más de 800 expertos y organizaciones legales y de salud pĂşblica instaron a la administraciĂłn a declarar a los hospitales y clĂnicas como zonas «libres de autoridad» para garantizar que no se realicen tales acciones en o cerca de los centros de salud. «Va a socavar la salud individual y colectiva si las personas no se sienten seguras para utilizar la atenciĂłn y responder a las preguntas de los funcionarios de salud pĂşblica», dice la carta.
Una carta de nueve senadores demĂłcratas instĂł de manera similar a Trump, Pence y miembros del grupo de trabajo sobre coronavirus a detener la aplicaciĂłn de la ley de inmigraciĂłn civil en o alrededor de las instalaciones de atenciĂłn mĂ©dica. La carta tambiĂ©n pedĂa que Seguridad Nacional declarara pĂşblicamente que la nueva regla de carga pĂşblica de la administraciĂłn no etiquetarĂa a los inmigrantes como «carga pĂşblica» por recibir tratamiento para el coronavirus.
«El miedo a la deportaciĂłn no deberĂa afectar si un paciente enfermo busca atenciĂłn», escribiĂł la Dra. Mona Magat en un editorial para el Tampa Bay Times, poco despuĂ©s de que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, declarara un estado de emergencia sobre el virus. Magat, un mĂ©dico practicante en San Petersburgo, implorĂł a DeSantis que «se asegure de que sus palabras coincidan con sus acciones decisivas y solicitĂł pĂşblicamente que la legislatura deje de avanzar en medidas antiinmigrantes que inspiran miedo, como el mandato E-Verify hasta que el coronavirus estĂ© bajo control».
En una declaraciĂłn contradictoria al Miami Herald, ICE declarĂł que COVID-19 no es una «circunstancia exigente«, pero aun asĂ alentĂł a las personas a buscar atenciĂłn para el virus «sin temor ni vacilaciĂłn». Ni el ICE ni el DHS han declarado hasta el momento explĂcitamente que no se dentendrá en los centros de atenciĂłn mĂ©dica.
Prohibiciones de viaje y violencia
A fines de enero, el presidente Trump suspendiĂł y limitĂł la entrada de inmigrantes y ciudadanos extranjeros que venĂan de China, y dirigiĂł a las personas que habĂan viajado recientemente a China a 11 aeropuertos estadounidenses designados. El 29 de febrero, la proclamaciĂłn se extendiĂł para restringir a los que vienen o viajan a Irán en los Ăşltimos 14 dĂas. Los brotes tempranos notables en Italia y Corea del Sur no han cosechado tales limitaciones de viaje hasta ahora.
«Cerrar la frontera, construir un muro fronterizo no detendrá ningĂşn virus si no es por la colaboraciĂłn entre los gobiernos, y creo que deberĂa ser una prioridad, colaboraciĂłn en lugar de aislamiento», dijo a KOB4.
Varios videos que muestran confrontaciones racistas y violentas contra asiáticos y asiático-estadounidenses han circulado recientemente en las redes sociales, mientras que las empresas y restaurantes de propiedad asiática desde Seattle hasta el barrio chino de Nueva York han reportado caĂdas significativas en los negocios en las Ăşltimas semanas.