“Sin duda alguna, el Congreso ha violado el orden constitucional”, dijo, y agregó: “La constitución no permite que un presidente en ejercicio sea acusado o penalizado políticamente”.
“Un presidente peruano puede ser investigado y acusado cuando termine su mandato, tal como sucedió con [los expresidentes] [Alejandro] Toledo, [Alan] García, [Ollanta] Humala y PPK [Pedro Pablo Kuczynski]”.
El propio Vizcarra, que según la mayoría de las encuestas aún tiene más del 50% de aprobación de los votantes, también cuestiona la legitimidad de su juicio.
“¿Fueron decisiones tomadas a favor de… Perú y peruanos o fueron decisiones tomadas solo por intereses personales y grupales?” preguntó.
Durante los días siguientes, miles de peruanos salieron a las calles para protestar contra el nuevo régimen de Merino, lo que provocó enfrentamientos con la policía y provocó decenas de manifestantes heridos y dos muertos.
Luego de las muertes, Merino anunció que renunciaría para tratar de apaciguar a los manifestantes. “Yo, como todos, quiero lo mejor para nuestro país”, Merino dijo en un discurso televisado.
Tras su renuncia, el Congreso nombró al legislador centrista Francisco Sagasti como presidente interino, la tercera persona en ocupar el cargo más alto en una semana. Tras su nombramiento, Sagasti pidió a los peruanos que demostraran moderación.
“Es absolutamente necesario mantener la calma, pero no confunda esto con pasividad, conformidad o resignación”, dijo Sagasti en un discurso al Congreso luego de su juramentación.
Los manifestantes, por otro lado, estaban indecisos sobre lo que significaba el nombramiento de Sagasti para el país.
«Creo que Sagasti es alguien que da garantías democráticas, que puede lograr una transición hacia un nuevo gobierno que estará bien», dijo Paloma Carpio, una manifestante, a Reuters.
“Francamente, es la misma basura. La máscara ha cambiado pero todo sigue igual ”, dijo a la publicación otro manifestante, José Murguía.
Se espera que Sagasti cumpla su mandato hasta julio del próximo año, con una nueva elección presidencial programada para el 11 de abril.
¿Qué sucederá a continuación?
Ahora, los peruanos tendrán que esperar hasta abril para elegir a su próximo líder. Mientras tanto, Sagasti ya extendió su brazo hacia la gente, incluso fue a visitar a algunos de los manifestantes heridos e insistió en entablar un diálogo.
Sin embargo, los disturbios en el país no desaparecerán de la noche a la mañana, ya que muchos creen que la eliminación de Vizcarra fue simplemente la última gota después de años de corrupción y desconfianza del gobierno.
«Algunas personas piensan que las protestas se van a detener solo porque Merino se fue, pero yo creo que acaba de volar la tapa de una olla a presión que se ha estado construyendo durante años», dijo Denisse Rodríguez-Olivari, politóloga peruana de la Universidad Humboldt en Berlín, Alemania, a CNN. «La gente se ha dado cuenta de que ejerciendo cierta presión durante unos días pueden lograr algo».
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