La organización Human Rights Watch, ha presentado una investigación que realizó en asociación con el Programa de Traumas y Salud Mental de la Universidad de Stanford y la Clínica de Defensa del Niño y la Familia de la Universidad de Willamette.
En esta investigación señala el impacto del Programa de Protocolo de Protección al Migrante (MPP, por sus siglas en inglés) más conocido como “Permanecer en México” en los niños que se han visto forzados a esperar con sus familias en México por una respuesta a su caso de asilo.
El programa “Permanecer en México” empezó el 29 de enero de 2019, en el cual algunas personas extranjeras que ingresen a los EE.UU. sin documentos son enviados a México mientras dure su proceso de inmigración. Hasta el momento, se ha enviado más de 59,000 personas a México incluyendo al menos 16,000 menores de edad.
Para este estudio, se entrevistó a 60 familias (padres e hijos) de diferentes países, que solicitaron asilo entre noviembre de 2019 y enero de 2020, asimismo a especialistas como abogados médicos, líderes, etc.
Los principales hallazgos del estudio fueron:
– Los padres señalan que mientras están esperando en México, ellos o los niños fueron golpeados, acosados, agredidos sexualmente o secuestrados, incluso fueron acosados o extorsionados por la policía mexicana. Human Rights Watch señala que a enero del 2020 al menos hay 800 casos de violencia contra los inmigrantes.
– El Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. sugiere que no debería incluirse a grupos muy vulnerables en el programa, pero la interpretación por parte de los agentes de inmigración no es clara. Por ejemplo, se han regresado a México a niños y adultos con problemas de salud graves, embarazadas o con discapacidades.
– Hay preocupaciones por el proceso de las audiencias de los inmigrantes, por ejemplo, deben presentarse en el cruce fronterizo y en lugares inseguros entre 3 a.m. a 4 a.m. para esperar su audiencia de las 8:00 a.m. y en algunos casos con niños pequeños. Esta espera se puede dar durante varias horas y debe realizarse de manera silenciosa, algo que es imposible para niños de corta edad.
– En muchos casos, después de las audiencias son trasladados a celdas de detención frías y superpobladas (conocidas como “hieleras”). Esta detención podría durar uno o dos días, aunque se conoce de casos que al menos están siete días. Esto provoca a los inmigrantes querer abandonar su caso por el miedo de los niños a ser detenidos nuevamente.
– Las familias describen su desesperación, desesperanza, ansiedad y deterioro de las relaciones familiares. Los niños que son susceptibles al trauma experimentan dificultades de aprendizaje, problemas de salud y comportamiento.
Las conclusiones por parte de la Dra. Nancy Wang, profesora de medicina de emergencia en el Centro Médico de la Universidad de Stanford es que “El Programa ‘Permanecer en México’ está poniendo en riesgo a las familias que ya enfrentan situaciones desesperadas”. Asimismo, el Dr. Ryan Matlow, profesor clínico asistente en el Departamento de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento del Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford señaló que «Las condiciones, las amenazas a la seguridad y la sensación de incertidumbre que enfrentan los solicitantes de asilo mientras esperan en México crea estrés psicológico crónico y severo para los niños y las familias».